Nuevas tendencias en imagenología híbrida: PET/RNM.

En la historia más reciente de la Medicina Nuclear hemos vivido dos hitos importantes: el primero es la aparición del PET y el segundo el invento del equipo híbrido PET-TAC, que une la información metabólica del PET con la información anatómica de la TAC. Sin embargo, no podemos obviar que la Resonancia Nuclear Magnética (RNM) tiene más resolución de tejidos que la TAC en cerebro, hígado, páncreas, huesos, pelvis, abdomen o mediastino y que sería la técnica más adecuada de elección para hibridar con el PET. De modo que PET-RNM es una técnica de imagen que permite aplicar la elevada capacidad de contraste de los tejidos blandos y la especificidad de la RNM a la importante información metabólica aportada por el PET. En este sentido, comienzan a ser frecuentes los artículos científicos como los de Tatsumi et al, Daftary, Sauter et al o Bolus et al, más recientemente [1-5]; así como otros más antiguos que ya comenzaban a vislumbrar la necesidad de la unión de la información metabólica del PET con la de la RNM como el de Seemann [6]. Como otro dato a favor de que el PET-RNM se está incorporando a la panoplia de pruebas que permiten la fusión de técnicas de Medicina Nuclear con otras técnicas de imagen, es el hecho que ya no solo aparecen artículos sobre ello sino que es tenido en cuenta en los congresos científicos como por ejemplo el de la EANM que se celebrará en este a o 2011.